Muchas veces asociamos el trabajo con tecnología a una actividad solitaria, la cual es ejecutada sólo por el profesional y su equipo. Pero quien piense que quedarse conectado a la computadora todo el tiempo es la única función del área de tecnología, se equivoca. Para los consultores de Global Services, quienes viajaban por todo el mundo antes de la pandemia, estar lejos de casa nunca fue sinónimo de soledad. Este es el caso de Andre Fabbro, consultor de Global Services en Liferay, quien nos muestra que no hay fronteras para el trabajo en equipo.
Antes de empezar a trabajar en Liferay en 2014, Fabbro ya conocía nuestra tecnología y se había encantado con las soluciones Liferay. Por eso, cuando surgió la oportunidad de ingresar a nuestro equipo, él no dudó en aceptarla. Como consultor de Global Service, hoy él se desempeña en la personalización de proyectos específicos para las empresas e implementa soluciones innovadoras a través de la integración de la plataforma Liferay a las tecnologías ya existentes en la empresa del cliente. Navegando por los conocimientos de front-end y back-end, los consultores guían a los desarrolladores de partners o clientes para obtener la mejor definición de la arquitectura de software y la infraestructura de sistemas dependiendo de cada necesidad.
Alianza a largo plazo
En estos siete años en Liferay, André Fabbro presenció y fue parte de muchos cambios. Los consultores de Global Services que trabajan en el terreno atienden personalmente a clientes de diversos países en Latinoamérica. "Antes, mi vida estaba dentro de una maleta. Estuve muchos años viajando", recuerda Fabbro. Desde Brasil, comenta sobre los constantes viajes a países como Chile, Panamá, México y Colombia: "Hay pros y contras. Viajas, estás fuera por mucho tiempo, extrañas a tus amigos y familia. Sin embargo, al mismo tiempo, conoces otras personas y culturas. Es bastante enriquecedor".
Incluso cuando estaba en terreno, Fabbro explica que el trabajo de un consultor nunca fue una tarea solitaria, pues estuvo siempre acompañado por el equipo de Global Services, aunque fuese a la distancia. Al fin y al cabo, detrás de cada consultor hay un equipo repartido por todo el mundo con un gran conocimiento sobre la implementación de la tecnología Liferay en diferentes escenarios, dispuesto a ayudar en lo que sea necesario. La alianza y el trabajo en equipo son algunas de las soft skills que Fabbro más valora como consultor de resolución de problemas, además de ser algunas de las razones que hicieron su trabajo aún más significativo a lo largo de estos siete años.
Experiencia para toda la vida
Actualmente, trabajando de manera 100% remota, analiza su carrera como consultor de Liferay de manera bastante positiva. Las vivencias que obtuvo durante todos estos años en el área le dejaron conocimientos y recuerdos que van más allá del ámbito profesional. "Tuve muchas experiencias distintas, con clientes de diferentes tecnologías y culturas. Todo eso me dio madurez profesional y comprensión sobre todo en la vida. Y, pensando en el aspecto no técnico, sumó mucho a toda la experiencia que tuve en estos años viajando".